5.5.4.2. Hidroseparador (elutriador)

El hidroseparador (o elutriador) es un aparato simple para separar amalgama de arenas negras y piritas después de la amalgamación del oro (ver Foto 37).
Sus ventajas son:

El hidroseparador separa partículas por su diferente peso específico; separa la amalgama y el mercurio de las colas de amalgamación (piritas y arenas negras), en una columna de agua de flujo ascendente en contracorriente alimentada con sólidos.

Las piritas y/o arenas negras, por su peso más liviano, son elevadas por la columna ascendente de agua, expulsadas por el borde del embudo de separación y recolectadas en el cuello de recepción; luego son vaciadas a un recipiente exterior (balde).

La amalgama, el mercurio y, eventualmente, el oro libre, se hunden debido a su alto peso específico hasta llegar al recipiente colector de amalgama, que se puede retirar fácilmente del tubo de separación, después de terminar el proceso.

Es posible regular la fuerza ascendente de la corriente de agua, abriendo o cerrando la válvula de ingreso de la misma.

VALVULA MAS ABIERTA RESULTA EN:

VALVULA MAS CERRADA RESULTA EN:
  • menor flujo de agua ascendente
  • separación más lenta
  • salida de partículas más finas
  • mejor recuperación de amalgama y mercurio fino (atomizado)
  • amalgama recuperada con impurezas de piritas y/o arena gruesa

Para una separación eficiente, se recomienda tamizar la carga (clasificar), para evitar la entrada de piritas y/o arena negra con tamaño mayor a 2 mm, difíciles de suspender y eliminar con un flujo suave de agua. El grano grueso puede tratarse separadamente con batea. Si no se eliminan las partículas gruesas, estas descenderán junto con la amalgama al fondo del recipiente colector.

Es necesario alimentar el separador hidráulico en forma continua con un volumen de carga constante.

Se debe regular la corriente ascendente de agua de manera tal que las piritas y/o la arena negra salgan y se eliminen lentamente.

Para asegurar una buena recuperación de la amalgama, se puede repetir el proceso realimentando las colas una y otra vez, con menor presión de agua, hasta lograr una buena recuperación o con el mismo propósito, instalar 2 ó 3 elutriadores en serie para facilitar el repaso.

Terminada la alimentación de carga, se cierra la válvula y se retira el recipiente de amalgama del tubo de separación. Normalmente, el producto no es totalmente limpio. Todavía contiene partículas de mineral pesado grueso, que se pueden eliminar con una batea.

El hidroseparador puede ser fabricado fácilmente en talleres locales.

Foto 37. Separador  hidráulico (Coop. Cotapata, Bolivia)